miércoles, 11 de noviembre de 2015

Capitulo 3

 "¿Que pasa cuando por fin el demonio y el pequeño ángel se conocen?, ¿podría ser el fin del mundo no?

-Recuerdo que cuando era niña y jugaba con mi padre, había conocido a dos tipos, los recuerdo perfectamente, pero no lograba entender como ese tipo del restaurante, bueno no era que estaba segura, ni tampoco quiero parecer una loca. Lo que quiero decir, es que, ese muchacho, lo recuerdo de mi infancia, no se como, quisiera pensar que solamente había sido un sueño, que son recuerdos sacados de mi mente, oh simplemente son fantasía.

-Fay! Oye, tenemos el trabajo! Tenemos que celebrar!.- Dijo Alex, por un momento y no se como, se me había olvidado que estaba en el restáurate, pero es que ese muchacho no lo iba a sacar de mi mente, al menos hasta que supiera el por que pensaba tanto en el.

-Si esta bien, vamos a donde quieras.- Sonreí, que mas me quedaba por hacer, después de no haber aportado nada en la entrevista.

-Bien, ¿quieres comer aquí? Dicen que la comida es algo cara, pero sabe deliciosa, digo, o podemos ir a otra parte si a si lo prefieres..- Ese muchacho apenas lo había visto y sabia que lo conocía de alguna parte, no podía dejarlo ir de esa manera.

-No esta bien, comamos aquí, creo que tengo un poco de dinero en mi bolsa, pueda que alcance para los dos..- Demonios, tenia que dejar de parecer una loca que anda buscando a un chico por todos lados.- Vamos.

-Esta bien...- Me miro de una manera extraña, y tenia todo el derecho de mundo.- Señor, no tenemos mesas reservadas..

-Solo por hoy caballero....- Otro señor, parecido al recepcionista, se acerco y le dijo unas palabras en el oído, solo esperamos a que nos dijera si nos iban a dar una mesa o algo.- Bien, un señor acaba de decir que el va a pagar su comida, así que coman lo que se les antoje... pasen por favor.- Tomo unas cartas, y nos acompaño a una de las mesas donde el supuesto señor iba a pagar nuestra comida.

-Bien,¿ y donde ese señor que quiso pagar nuestra comida?.- Pregunte. Tenia que preguntar, solo para saber que no era un pervertido, solo esperaba que ese señor fuera el tipo que había visto, aunque las posibilidades un 40%, así que no tenia que confiar mucho.

-Dijo que pronto estaría con ustedes...- Nos dejo unas copas con agua.- Creo que tiene otros asuntos mas importantes.-Se fue.

-¿No crees que es algo extraño que una persona que no conocemos nos quiera pagar la comida? Digo ni siquiera lo conocemos. Nunca podría llegar a un restaurante y elegir al azar a quien pagarle la comida.- Dijo Alex, luego de que tomara un sorbo de la copa que tenia agua.- Bueno, no esta mal que nos hagan el favor, ¿pero no crees que es un tanto extraño?

-Si bueno, creo lo mismo, pero tal vez sea alguien a quien conozcamos, no puede ser simple casualidad que solo por que nos vio y tal vez por que parezcamos indigentes nos quisiera comprar la comida de este lugar, tan caro.-Dije, y era verdad, tenia que ser alguien a quien conozcamos, tal vez mis padres de la noche a la mañana se volvieron ricos y les dio lastima verme tan sucia.. Aunque para nada que era verdad eso.- Bien sabes que voy a baño.

-Me levante y deje la servilleta en la mesa, bueno, no sabia donde se encontraban los baños, tenia que encontrar a uno de los meseros o al recepcionista. Decidí ir hacia uno de los meseros que estaba dejando una botella de vino a una pareja, por supuesto que iba a esperar a que se desocupara. Pero entonces llego un tipo cerca de el y empezó a hablar, y entonces se fueron. Entonces tenia que empezar a buscar el baño por mi cuenta. Camine por un pequeño pasillo de mesas, entonces me di cuenta de que este restaurante era realmente grande, pero seguí caminando, hasta que dos paredes se partían en dos, y se hacían dos entradas entonces camine un poco mas rápido. Y cuando llegue al final de la pared, ninguno de los dos costados tenia señal... entonces ¿Cómo iba a adivinar cual era el de los hombres y el de las mujeres? Hasta que un tipo salió de el costado izquierdo.

-Hola, disculpe, ¿estos son los baños verdad?.- Dije, realmente avergonzada, ¿pero que mas podía hacer?.- Disculpe mi ignorancia, soy nueva en este lugar.

-Hola, si estos son los baños, me paso lo mismo, no te preocupes.- Vaya, tenia una sonrisa medio rara, pero linda.- Me llamo Dante.- Me extendió la mano, pero que hombre tan gentil.- ¿Cuál es tu nombre?

-Oh, mi nombre es Faydelin.- Le tome la mano, se veía que era un hombre con modales, ahora como me sacaba de este hombre, en realidad tenia que entrar al baño.

-Oh claro, ¿Tu eres la chica que viene con el chico raro ese verdad?.- Sonrió de nuevo, ¿Cómo es que esa sonrisa no podía dejar de verla?.- Bueno, entonces te espero en la mesa.

-Espere, ¿ustedes fue el que pago por nuestra comida?.- Bueno, ahora si que estaba sorprendida, ¿Un hombre tan guapo, gentil?.-Vaya, esperaba que fuera un señor que le gusta violar chicas y esas cosas...

-Bueno, me alegro que no sea así.- Bueno, ahora que lo pienso podría ser un buen partido.- Entonces te espero donde tu amigo, tengo que conocerlos mas a fondo chicos.

-Se fue, pero que hombre. Sabia que no tenia que fiarme, y muchos menos hombres como el, ¿pero que pasaba solo por que nos comprar la comida, y solo por una vez?, entonces regrese a donde estaban ellos, Aunque Alex ya no estaba, ni tampoco su suéter.

-Regrese... ¿Pero que paso con Alex?.- Pregunte. Esperaba que solo se hubiera sentido mal y hubiera decido por irse a reponerse.

-Se fue, dijo que se sentía mal.- Y De repente ya teníamos una botella de vino en la mesa.- Creo que no se sentía bien, la verdad que no tenia buena cara. No te preocupes, dijo que cuando llegar a casa, el llamaría.-Bueno, al menos eso me había sentir mejor.

-Bien, entonces creo que no tengo nada de que preocuparme.- Me senté cómodamente, entonces ya podía cenar con el, y no pensar en nada mas.- Y entonces, ¿Cuál es el especial del día?

-Carne rociada con un poco de vino, y... un poco de hermosura, mezclada con un poco de perfume....mmmm...de Eternity ¿puede ser?.- Entrecerró sus ojos, adivinando.- Y unos ojos café hermosos, y unos labios rosados, deliciosos...

-Vaya... Acertaste con lo del perfume, pero no en todo lo demás.- No se como le hacia este tipo para hacerme sentir tan alagada, sabia que no podía dejar que este tipo me hiciera sentir de esta forma, por que ni siquiera lo conocía, pero no podía dejar de sentirme de esa forma, no podía dejar de sentirme seducida por el...

-Bueno, pronto tendré que irme, en estos últimos día eh tenido que estas algo ocupado, pero tendré demasiado tiempo para ti después.- Comenzó sirviéndonos una copa de ese vino blanco.- Espero que luego podamos salir de nuevo, y que me permitas invitarte a comer de nuevo.- Me miraba, no una forma pervertida, si no de una forma, sensual, y gentil, como si me conociera de toda la vida. Entonces sonreí, sonreí de la única manera que le hubiera podido sonreír a alguien cuando me comenzaba a gustar...

-Acepto...- Mire hacia abajo... y volvi a sonreirle, y ambos nos estabamos sonriendo.



 
 
ESPERO LES HAYA GUSTADO, ESCRIBAN EN LOS COMENTARIOS SI QUIEREN CONTIENUAR LEYENDO.
GRACIAS DE NUEVO A LOS QUE SE TOMAN EL TIMEPO LEYENDO ESTA PEQUEÑA NOVELA.
EN CADA CAPITULO, DARAN A CONOCER NUEVOS PERSONAJES.

domingo, 8 de noviembre de 2015

Capitulo 2

"¿Que pasa cuando un demonio y una ángel están en guerra? Por el amor de una niña..."
 
-Una pequeña niña se encuentra en el parque, jugando, escondiéndose de su padre, ese juego era tan divertido para aquella pequeña.

-Pequeña Fay!.- Grito su padre.- Ven aquí, recuerda que no puedes ir tan lejos de papa.- La niña seguía corriendo, y no hacia caso a lo que su padre le estaba diciendo.- Pequeña Fay, ven aquí!.- Pero la niña seguía corriendo, y entonces ya no escucho los gritos de su padre.

-La pequeña Fay, choco con un hombre, el cual era alto, y cuerpo pronunciado, el cual usaba un esmoquin negro, el hombre se acerco a ella, se agacho y le dio una paleta, pero es que nadie hacia nada, parecía que para toda la gente era normal ver a un desconocido dar una paleta a una niña en medio de un parque. Pero al parecer, parecía que el tiempo se había detenido, la niña hacia caso omiso, ¿pero por que yo era el único que podía ver aquello? tenia que hacer algo para alejar aquel hombre de esa niña.

-Caballero, creo que el padre de esta niña la anda buscando.- Me fui acercando poco a poco, sabia por supuesto quien era este hombre, pero no quería arriesgar la vida de las personas y mucho menos la de la esta pobre niña.- Permítame hablarle a su padre, tiene rato buscándola.

- ¿Mi papi? ¿Dónde esta el?.- Ahora la niña estaba algo asustada, tal vez no se había dado cuenta de que la gente al rededor de nosotros ni siquiera se movía.- ¿Me puedes llevar con mi papi?

-Yo te llevare con tu padre niña.- Como iba a permitir que esa cosa se llevara a esta pobre niña, tenia que llevarla yo mismo con su padre.- No te preocupes niña, yo se donde se encuentra tu padre, vamos.- Le enseñe mi mano para que la tomara y no me soltara, lo que menos quería era que esta niña saliera corriendo, y que se alejase de mi.

-No creo que sea buena idea, ¿ por que no mejor dejamos que se vaya sola? su padre no esta lejos de aquí.- Dijo, tomándola también de la mano. ¿Pero es que estaba loco? Sabia por que es que yo estaba ahí, y de todas formas el seguía interviniendo.

-Esta bien, entonces dejémosla que se vaya con su padre ella sola.- No confiaba para nada en el, era mas bien conocido por ser un traidor y mentiroso, y todo lo malo que se pueda uno encontrar.-Vamos, dejémosla que se vaya.- Dio unos cuantos pasos para atrás, y entonces la gente comenzó a moverse, su padre comenzó a correr de nuevo, buscando a su hija, asustado por no poder encontrarla. Pero entonces... SANTO CIELO... No me había dado cuenta que la paleta aun la tenia en sus manos, en esas pequeñas manitas.- Tu!.- Y en realidad ¿Qué mas me quedaba por decirle? no podía hacer nada ahora, solo esperaba que esa pobre niña no colapsara.- La niña... por que la dejaste con la paleta! Sabia que había algo que no podía dejar pasar, como pude....

-Observa! Por eso es que las cosas como tu, no deben de seguir aquí "cuidando de la gente".- Observe a aquella pobre niña, ya no podía ni siquiera acercarme a ella. Antes de que llegara su padre, la niña cayo al suelo, y golpeo su cabeza en una de las banquetas, el papa corrió hacia ella, tratando de alcanzarla a aquella pobre criatura, pero no la alcanzo para detener el golpe. El padre desesperado, comenzó a pedir ayuda y yo tenia que hacer algo.- Ni lo pienses! Ahora no puedes hacer nada, ni siquiera yo, así que déjala ir, ahora es mía.

-No tenia que dejar que eso pasara.- Agache mi cabeza, que podía hacer ahora, pero tampoco podía rendirme, menos ahora que el la tenia en su poder, esto solo seria un pesadilla... luego todo pasaría, y nada habría pasado entonces..- Ya no te acerques a ella, por lo que mas quieras.

-Sabes que no puedo hacer eso, ahora que es mía con mas razón tengo que estar carca de ella..- Y me odiaba por ese echo, me odiaba por que no podía hacer nada para que el se aleje de ella.- Pero entonces si te quieres interponer, ¿sabes que tendré que matarte verdad? Por que... realmente eres un buen contrincante cuando se trata de salvar a las personas, es gratificante pelear y ganar contigo, pero si ahora tenemos que estar separados y tendría que matarte, entonces con todo el gusto estaría dispuesto a hacerlo.- Y lo había dicho tan sínicamente que no podía creer que tenia una sonrisa en sus labios.
 
ESPERO LES HAYA GUSTADO, ESCRIBAN EN LOS COMENTARIOS SI QUIEREN CONTIENUAR LEYENDO.
GRACIAS DE NUEVO A LOS QUE SE TOMAN EL TIMEPO LEYENDO ESTA PEQUEÑA NOVELA.

viernes, 6 de noviembre de 2015

CAPITULO 1

 


´´¿Que pasa cuando la fe una persona se aferra a la de la otra persona? Es difícil saber la respuesta cuando la persona no sabe que es lo que quiere, y también cuando esa persona daría la vida por la otra misma.´´

 
   -Así comienzan todos los días, el ruido de los carros, la música del vecino, mi vecina tan habladora, que parece que nunca terminara de hablar no se cuanta tontería, esta vida es tan aburrida, creí en el momento en el que deje a mis padres, que esto seria lo mejor, creí que era lo mejor para ambos, dejar a mis padres e irme, sin despedirme. Pero cualquiera diría que quiero regresar, pero ese no es mi caso, no quiero volver a casa de mis padres, no lo haría de todas formas.
  
   -Me levanto de mi cama, al fin y al cabo que otra cosa podría hacer, entre en la regadera, y empezar a pensar en las cosas que me faltaban por hacer, demonios que eran demasiadas. Termine de bañarme, y empezó a elegir la ropa que me pondría en el día, esto no era lo que hacia todos los días, pero de alguna forma cuando lo hacia calmaba mi mente.
 
   -Sabia que tenia que ir a trabajar pronto. Mi trabajo... No tenia trabajo, soñaba con el día en que dejara la casa de mis padres poder trabajar y mantenerme a mi misma, pero por lo visto nada fue tan fácil como yo lo veía. Pero entonces conocí a Alex, un chico un poco extraño para algunas personas, pero mi mejor amigo, se podría decir que ahora es como mi hermano. Quedamos en este día para ir a buscar trabajo, ojala y esta vez ambos tengamos suerte.
 
   - Comienzo a vestirme con un jeans cómodos, una blusa un poco suelta, y unos zapato-tenis cómodos, tal vez no iba a ser el mejor día, pero esperaba que fuera uno genial.
 
   -Alguien toca la puerta, quien mas si no Alex, entonces solo grito que pasen.- Hola, hola! pensaba que no vivía nadie aquí, tengo media hora tocando el timbre..- Dijo. Paso cerrando la puerta detrás de el y camino detrás de mi a la cocina.- Que hubiera pasado si nada mas es un extraño el que esta tocando la puerta.
  
    - Alex, sabes que el único que toca esa puerta eres tu, nadie mas sabe donde vivo.- Y era verdad, desde el momento en que me salí de la casa de mis padres, había recibido llamada tras llamada de ellos, pero no podía permitirme que nadie mas supiera donde me encontraba, y menos por que sabia que tan peligroso era para ambos.- Ya sabes eso, además si fuera tan social como lo era antes, medio Praga estaría en mi casa.
  
   -No es tan malo Fay, simplemente hay que saber con quien.- Sabia que si tocaba ese tema era letal para mi, tan solo hablar de mis padres me volvía loca.- Pero esta bien. Entonces dime.- tomo una manzana y empezó a lazarla hacia arriba, cachándola una y otra vez, sabia cuanto odiaba que hiciera eso.- ¿Donde vamos a buscar trabajo? digo, podría ser un restaurante, de echo abrirán uno cerca de por aquí.
  
   -Si, claro.- Las ganas de salir y buscar trabajo se habían desaparecido totalmente, pero tenia que hacer algo para salir adelante si no quería llegar a parar en la puerta de mis padres pidiendo perdón.- Vamos de una vez, tengo que comprar algunas otras cosas.
  
   -Bien, vamos en mi coche... oh espera, es que tu no tiene...- Por supuesto que no lo iba a dejar terminar de decir esa bobada, sabia lo difícil que es conseguir un carro en esta ciudad y mas cuando seria algo indispensable. Tal vez esa cachetada le dolió mas que algunas otras veces.
  
   -Esta bien, se me había olvidado que de la nada sabias artes marciales y eso...- Entonces comenzó a reírse, me gustaba cuando reía, por que entonces yo comenzaba a reírme junto con el.- Oye enserio, ¿esas pesadillas ya no volvieron verdad?.- Tenia que hablar de nuevo de eso, recientemente lo había olvidado.
 
   -No, Alex sabes que no me gusta que me recuerdes esas cosas.-No me encontraba irritada, es solo que a veces las personas que se entrometen tanto en mi vida son un tanto irritantes.- Se que quieres saber por que te preocupas, pero estaré bien, ambos estamos a salvo ahora.
 
   -Sonrió agachando la cabeza.- Sabes que no es solo que me preocupe por ti, pero ya sabes lo que paso la ultima vez, y sabes que yo estaré aquí para ti, todo el tiempo que tu necesites....- Comenzó a rascarse la cabeza.- Por que me importas.
 
   -No esperaba que me dijera aquello, pero se sentía tan bien...
 
   -No me había dado cuenta de que habíamos llegado al auto de Alex, vaya, es que el hablar con el era demasiado, simplemente el me hacia bien, pero yo a el no, y entonces que puedo hacer si yo no soy buena para el. Algo tendría que hacer, pero que...
 
   -Mira, empecemos en el restaurante que te dije, luego si no quieres entonces seguiremos buscando hasta encontrar algo perfecto para ti.- Sonreía cada momento que hablaba.
 
   -Bien, vamos...- Arranco el carro y entonces nos fuimos, solos pasamos unas cuantas cuadras y llegamos al restaurante, era hermoso, entramos y todo se veía elegante, nada comparado a otro a los que había ido a comer con compañeros oh con mis padres. Entramos y hablamos con el de recepción una persona un bajo de estatura, con poco cabello sobre su cabeza, y se veía tan gracioso con su esmoquin negro y su corbata anaranjada fosforescente, no teníamos ninguna reservación, solo queríamos preguntar por el trabajo, pero entonces una cara se cruzo enfrente de mi, y deje de prestar atención... yo a el lo había visto antes.. estaba segura, mas que segura, yo a el lo conocía de alguna parte... Su cara, sus ojos, esa boca.... Yo.. el... abro mis ojos sorprendida... es el!!!
 
 
 
ESPERO LES GUSTE ESTE CAPITULO, PONGAN EN LOS COMENTARIOS SI QUIEREN CONTINUAR LEYENDO.
GRACIAS, A LOS QUE SE TOMARON EL TIEMPO.
 
 

Bienvenida

BIENVENIDAS A ESTA HISTORIA.
Eh escrito otras historias pero espero que esta vez espero terminarlas :)
Gracias a esas personas que se toman su tiempo para leerla, y espero que sigan esta pequeña historia hasta el final.